Capítulo 7

Mi eterna mitad.

Capítulo 6.

Miré a Lali y dormía como una pequeña nena indefensa. Besé su frente, y la llevé en brazos hasta casa. Cuando llegué, toqué el timbre y Tomás me abrió la puerta.

Tomás: ¿Está bien? –desesperado-

Peter: Está dormida –dejándola en el gran sofá-

Lali: Papá –dormida-

Tomás: Acá estoy –besando su frente- Dormí hermosa, todo está bien…

Capítulo 7.

Tomás: Todo está bien -le miró con los ojos llenos de lágrimas-

Lali: -quejándose adormilada- Tengo frío

Tomás: -corriendo a por una frazada y echándosela por encima- Ya, chiquita

Peter: Me parece que tiene fiebre –con la mano sobre su frente- Voy por el termómetro –fui y cuando volví, Tom estaba llorando- ¿Está bien? –preocupado-

Tomás: Solo es un poco de fiebre –secándose las lágrimas-

Peter: ¿por qué lloras, Tomás?

Tomás: Lastimé a mi chiquita, Peter, la hice llorar

Lali: papá –adormilada-

Tomás: Hija –tomando su mano- ¿te sentís bien?

Lali: No me voy a ir, me quiero quedar con Peter –transpirando-

Tomás: No hables, tenes fiebre –poniéndole un trapo en la frente-

Lali: No me quiero ir –llorando delirada-

Peter: No te vas a ir –acariciando su pelo-

Lali: -llorando-

Tomás: No te vas a ir, me voy a ir yo –lo miré asombrado- Tengo que viajar por temas laborales, lo siento

Lali: -adormilada-

Tomás: Tengo que hacer la maleta -dijo mirándome- Me voy mañana

Peter: Anda tranquilo 

Tomás se fue a su respectiva habitación y yo me quede con Lali. Mientras dormía la miraba, admirando su belleza.

Lali: ¿Soy linda que me miras tanto? -sonriendo medio consciente- 

Peter: Hermosa sos -besé su frente- ¿Te sentís bien?

Lali: Sí -sonriendo- ¿papá?

Peter: Haciendo la maleta, se va a...

Lali: No -salió corriendo a su habitación-

Cuenta Lali

Abrí la puerta sin tocar y me abalancé encima de mi padre.

Lali: No te podes ir -llorando, abrazándolo- No me podes dejar sola 

Tomás: Voy a estar bien hija -abrazándome- Y vas a estar bien, Peter te adora 

Lali: No -llorando- No te vayas, papá 

Tomás: -agarrándome la cara- Mirame La -lo miré- Si te llevo, vas a querer volver

Lali: No -llorando- Te quiero a vos, papá

Peter: Llevatela Tomás, ella te quiere a vos, no a mi -yéndose- 

Lali: Peter...

Tomás: Lali, voy a venir a visitarte seguido, no te preocupes -besando mi frente- Anda a ver a Peter

-.-.-.

Lali: ¿Estás enojado? -tocándole el hombro-

Peter: -moviéndose para que lo soltara- Andate Lali

Lali: No -me senté a su lado- Dale, no te enojes

Peter: Andate -me miró fijo- 

Lali: Amo tus ojos verdes -acariciando su mejilla-

Peter: Irónico que ames más a mis ojos que a mi 

Lali: No me digas eso -frunciendo el ceño-

Peter: Perdón 

-.-.-.

Lali: -llorando- Te voy a extrañar mucho -abrazándole-

Tomás: Yo también chiquita -besando su cabeza- Pero tenes un buen hombre a tus espaldas -sonriendo a Peter-

Peter: Señor Espósito -dándole la mano- Tenga un buen viaje

Tomás: Cuida a mi hija, Juan Pedro

Lali: -llorando- extrañame mucho -puchero-

Tomás: Te amo hermosa -besándome la cabeza- Me voy, acaban de anunciar mi vuelo -sonriendo- 

Peter: Adiós, Tomás

Lali: Chau papá

-.-.-.

Lali: ¿Seguis enfadado conmigo?

Peter: No...

Lali: Dame un beso entonces

Peter: No...

Lali: ¿Qué? -sorprendida- 

Peter: No quiero que te enganches, Lali, no soy un tipo enamoradizo

Lali: Pero yo creía que... 

Peter: Yo no me enamoro, Lali

Lali: Dijiste que me amabas -con los ojos llenos de lágrimas- 

Peter: Sí, y no sé por qué lo hice -pausa- Perdón, confundiste las cosas, no era mi intención

Lali: O sea, que nunca tuviste novia

Peter: Y nunca voy a tener ninguna, no soy un hombre de rosas y corazones 

Lali: Nunca me quisiste -mirando hacia el suelo- Creía que ibamos a formar una historia, creía que ibamos a hacer el amor, creía que me querías -llorando-

Peter: Yo no hago el amor Lali, yo tengo sexo

Lali: Me voy -subiendo las escaleras-

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¡Hola! No me odien, por favor, jajajja.

Un capítulo de mierda, lo sé, no he tenido tiempo, ni inspiración, ni nada de nada.

+5 comentarios y subo el 8.

@ohmyespozz

Capítulo 6

Mi eterna mitad.

CAPÍTULO 5.

Lali: Papá, ¿podemos hablar?

Tomás: La –sonriendo- Sí mi amor, pasa

Lali: Me da mucha vergüenza decirte esto –tapándome la  cara-

Tomás: Vení, sentate –me senté- ¿Qué pasa, chiquita?

Lali: Estoy intentando algo con un chico

Tomás: ¿Qué? ¿Con quién? ¿No te saca más de 3 años, no?

Lali: Papá, no te enojes, por favor –con los ojos llenos de lágrimas-

Tomás: Lali –serio- ¿con quién estás saliendo, y cuantos años te saca?

Lali: Peter y yo estamos intentando ser algo –lo miré, y estaba mudo- no te enojes, por favor –llorando-

Tomás: Recoge tus cosas, nos volvemos a Miami –levantándose-

CAPÍTULO 6.

Lali: No –llorando- No, por favor

Tomás: -gritando- OCHO AÑOS TE SACA, MARIANA, OCHO, ¿ESTÁS LOCA?

Lali: -gritando- ES MI PROBLEMA, PAPÁ, ACEPTÁ DE UNA VEZ POR TODAS QUE TENGO 18 AÑOS

Tomás: 17

Lali: -llorando- No me alejes de acá, por favor, te prometo que si pasa algo serás el primero en saberlo

Tomás: Hija –negó- recoge tus cosas

Lali: No –llorando- No papá, no me voy a ir –desesperada-

Tomás: RECOGE TUS COSAS LALI

Peter: -entrando- ¿Qué pasa acá? –viéndome como estaba- ¿Qué te pasa, Lali? –abrazándome-

Tomás: ALEJATE DE ELLA, NO LA TOQUES –agarrándome del brazo y tirándome a su lado en el suelo-

Peter: PARÁ TOMÁS, PARÁ UN POCO –mirándome- Soltala, estás lastimándola

Tomás: ES MI HIJA Y HAGO LO QUE SE ME CANTA CON ELLA

Peter: QUE SEAS SU PADRE NO TE DA DERECHO A HACERLE DAÑO –soltándome de su agarre y poniéndome detrás suya-

Tomás: ALÉJATE DE ELLA, JUAN PEDRO –gritando sacado-

Peter: NO, NO VOY A DEJAR QUE LA SIGAS LASTIMANDO

Tomás: Mariana –lo miré temerosa- ¿Nos dejas a solas? –miré con lágrimas en los ojos a Peter, y después a papá, y me fui-

Cuenta Peter.

Peter: Tomás, sé que no te hace gracia que salga con Lali, pero ella me interesa de verdad, siento por ella cosas que jamás había sentido por otra mina –me miró sentándose- Te prometo que no voy a hacerle sufrir, pero por favor, no te la lleves –con los ojos llenos de lágrimas-

Tomás: Es mi chiquita, Pedro –mirando hacia el suelo- No quiero que sufra, y menos por un pibe

Peter: Tomás, no voy a hacerle daño, antes me mato –dije sincero- No sé si te contó Lali que el otro día fue a ver a su mamá y la botó

Tomás: ¿Qué?

Peter: Sí, me contó que le culpó de la muerte de Patricia, que le dijo asesina, que seguía siendo la misma pendeja entrometida de siempre… ¿sabes cómo me encontré a Lali? Tirada en medio de un parque, llorando y muy mojada.

Tomás: No me dijo nada –con los ojos llenos de lágrimas-

Peter: -asintiendo- No quería que te enojaras, te ama con su vida Tomás

Tomás: Me siento una mierda –agarrándose la cabeza- Sos buena gente Peter, cuidala mucho, que no le pase nada a mi nena, por favor –asentí con lágrimas en los ojos-

Peter: Gracias Tomás –abrazándolo- ¿Por qué no andas a hablar con Lali?

Tomás: Vamos

Recorrimos la casa, y no había rastro de Lali. La llamamos muchas veces, y no nos atendía, nos empezamos a preocupar.

Tomás: Vos busca en la playa, voy a ir al parque y por los alrededores, cualquier cosa te llamo o me llamas

Tomás se fue y fui directo a la playa. Me recorrí la playa entera gritando su nombre, pero cuando llegué al final y me iba a dar la vuelta para volver con Tomás, vi una pequeña figurita tirada en el suelo. Me acerqué a ella y cuando me vio empezó a llorar, tirándose a mis brazos

Peter: Lali –ella lloraba- Tranquila chiquita –besé su cabeza- Tranquila gordita

Lali: No quiero que nos separen Pitt –llorando- Me muero si me alejan de vos

Peter: No –acunándola en mi pecho- hablé con Tomás, todo está más que aclarado

Lali: Estoy enamorada de vos, Peter

Peter: Te amo Lali… -mirándole a los ojos-

Se acercó a mí y me besó. Después de eso, se acurrucó en mi pecho, colocó su cabecita en mi hombro, y se quedó planchada. Pasó un ratito y llamé a Tomás

Conversación telefónica.

Tomás: Peter –llorando- No está por ningún lado, mira si le pasó algo –desesperado-

Peter: Está acá, Tomás –mirando a mi algo dormir-

Tomás: ¿Dónde? Voy para allá

Peter: No, anda a la casa, ahora la llevo, quedate tranquilo

Tomás: Rápido por favor

Fin conversación telefónica

Miré a Lali y dormía como una pequeña nena indefensa. Besé su frente, y la llevé en brazos hasta casa. Cuando llegué, toqué el timbre y Tomás me abrió la puerta.

Tomás: ¿Está bien? –desesperado-

Peter: Está dormida –dejándola en el gran sofá-

Lali: Papá –dormida-

Tomás: Acá estoy –besando su frente- Dormí hermosa, todo está bien…

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Hola,segundo capítulo del día,gracias por los 8 comentarios,+6 y mañana vuelvo a subir.Gracias por el aguante.

PD: CAPÍTULO DEDICADO A CANDELA Y ANA,QUE ME QUIEREN MATAR,JAJAJA.

Capítulo 5.

Mi eterna mitad.

CAPÍTULO 4.

Lali: Me siento fatal Peter, me perseguirá toda la vida –llorando-

Peter: No te puedo asegurar que vayas a olvidarlo, porque sé ciertamente que nunca lo podrás hacer –bajó la cabeza- mírame Lali –levanté su cabeza y miré sus preciosos ojos marrones- sé que nunca vas a olvidarlo, pero te aseguro que voy hacer todo lo posible para que no te atormente más, te prometo que esa sonrisa tan bonita que tienes va a volver, te lo prometo

Lali: -mirando mis ojos embobada- Gracias por todo Peter, te juro que no sé como agradecerte lo mucho que estás haciendo por mí

Peter: No seas tonta –riendo- No me debes nada, aunque… quien sabe, igual podrías darme un besito, o dos, no, dos no, tres, y te dejo libre –sonriendo-

Lali: -sonrisa-

CAPÍTULO 5.

Cuenta Lali

Lali: -sonrisa- lindo –Peter sonreía- ¿Sabes qué pasa? –me miró esperando a que respondiera- Pasa que nos conocemos hace dos días –sonriendo- y tú vienes con esa sonrisa que me mata, y el lunar, y así no se puede.  Además, casi no te conozco, podrías ser un asesino en serie –exagerando haciendo que Peter riera-

Peter: No soy un asesino –riendo- ¿te mata mi sonrisa? El lunar es de nacimiento –sonriendo canchero-

Lali: Peter ¿sos mujeriego?

Peter: Y.. –riendo- sí

Lali: -mi sonrisa desapareció-

Peter: Pero porque nunca me enamoré, si llegara a enamorarme todo podría cambiar

Lali:  ¿y alguna te mueve el piso?

Peter: Sí –sonriendo- Es una morochita petiza, 17 años tiene, es muy linda

Lali: -sonrisa- ¿la conozco?

Peter: Creo que si

Lali: ¿y cómo se llama?

Peter: Manuela

Lali: andate a la mierda –riendo-

Peter: -riendo- Desde que llegaste no he podido dejar de pensar en vos, Lali, no sé qué me pasa

Lali: –cabizbaja- Nos pasa lo mismo  

Peter: -se acercó sonriendo- ¿Sí?

Lali: -asintiendo-

Peter: Laa… -mirando mis labios fijamente-

Lali: ¿Sí? –hundida en esos ojos verdes-

Peter: ¿puedo besarte?

Lali: -sonrisa-

Me besó y agarró mi cara suavemente mientras yo pasaba mis brazos sobre su cuello y revolvía su largo pelo marrón. Me separé de su tentadora boca sonriendo.

Peter: ¿Es muy pronto no?

Lali: No entiendo

Peter: ¿Es muy pronto para decirte que desde que te vi no dejo de pensar en vos? ¿Es muy pronto para decirte que estoy enamorado de tu sonrisa? ¿Es muy pronto para decirte que estoy empezando a sentir cosas que ninguna mina ha conseguido hacerme sentir? ¿Es muy pronto para quererte pedir que seamos algo? Es muy pronto para todo, ¿verdad?

Lali: Peter yo…

Peter: Por favor Lali, te voy a hacer muy feliz

Lali: Yo… no puedo, perdón

Se levantó y se fue dando un fuerte portazo. Suspirando me acosté. A la mañana siguiente me desperté y lo primero que vi fue un desayuno enorme en la mesita de luz. Sonreí y comí. Cuando bajé Peter estaba hablando por teléfono con alguien.

Lo miré mientras hablaba, se veía muy perfecto. Le sonreí cuando me miró, pero no me devolvió la sonrisa, lo cual me pareció extraño. Cuando colgó, me miró y se fue a la cocina sin decir nada.

Lali: Hey –abrazándolo por atrás-

Peter: Hola –dándose la vuelta-

Lali: ¿Estás enfadado, verdad?

Peter: -negando-

Lali: Pitt

Peter: ¿Qué pasa?

Lali: Si te digo algo, ¿no se lo dices a nadie?

Peter: No –curioso- ¿qué pasa?

Lali: Quiero estar con vos –sonrisa- Porque me gustas –ruborizada- Porque ayer casi no pude dormir pensando en lo que me dijiste, estaba desvelada y bajé al living, y verte dormidito me llenó de amor el corazón –sonriendo- Te quiero Peter, te quiero muchísimo

Peter: ¿Me estás hablando en serio? –sonriendo incrédulo-

Lali: -avergonzada- Sí, pero si no queres no pasa nada

Peter: -beso-

Me besó suavemente. Nuestras bocas coordinaban a la perfección, y nuestras cabezas se movían al compás del otro. Nos separamos y sonreímos.

Peter: Bueno, ahora que estamos juntos, debo decirte que sos la mujer más linda que conocí

Lali: Te quiero Peter –sincera-

Peter: Me parece genial, porque yo también te quiero, hermosa –sonrisa, se quedó unos minutos en silencio- Tengo una idea –sonrió malvado-

Lali: Me das miedo cuando pones esa cara –riendo-

Peter: Tranquila enana, vamos –agarrándome de la mano-

Lali: Espera, espera, tengo que vestirme –obvia-

Peter: Tienes razón, ese pijama es solo e indiscutiblemente para mí y mis preciados ojos

Lali: Deja –beso- de –beso- hablar –beso- así –beso-

Peter: ¿Por qué? Suena intelectual –sonriendo-

Lali: -carcajada- me pones nerviosa, en serio, no hables así, amo tu acento argentino –sonriendo-

Peter: Hablaré con mi acento argentino entonces –beso- Andá a cambiarte, nos vamos de picnic

Cuando me vestí, bajé y Peter estaba preparando todo. Sonreí y besé su espalda mientras lo abrazaba desde atrás.

Peter: Acabé –sonrisa- ¿Estás lista?

Lali: Sí –beso-

-.-.-.

Peter: ¿Te gusta? –me miró sonriendo-

Lali: Es hermoso Pitt –recostándome en su hombro-

Peter: ¿Estás bien, La?

Lali: Sí –cerrando los ojos-

Peter: ¿Te sentís bien?

Lali: Sí –acariciando su mejilla- Estaba pensando…

Peter: ¿En qué?

Lali: ¿Qué va a pasar con mi papá?

Peter: Le diremos, sos lo suficientemente grande como para tener novio

Lali: Peter, no entendes, mi papá es el ser más cuida del mundo, se va a enojar

Peter: Se supone que si queremos estar juntos, tenemos que luchar –enojándose-

Lali: No te enojes –triste-

Peter: -suspiró- La, es tu papá, y si vos estás feliz, el lo está

Lali: Lo sé –sonrisa- Pasa que es lo único que tengo, y soy lo único que tiene, nos queremos demasiado, tenemos un amor incondicional el uno por el otro, no sé si me dejará estar un pibe que me saca 8 años de edad

Peter: Que linda forma de querer tenes –dijo irónico, mirando al lado opuesto del mío-

Lali: -suspiré- Pitt, no soy yo, es él, a mi no me importa tu edad, como si queres tener 40 –dije tierna- Yo te quiero así cual sos

Peter: -sonrisa- Te quiero Laa –dejó un pequeño beso en mis labios-

Lali: Te quiero también

-.-.-.

En el cuarto de Tomás, 21:30 de la noche.

Lali: Papá, ¿podemos hablar?

Tomás: La –sonriendo- Sí mi amor, pasa

Lali: Me da mucha vergüenza decirte esto –tapándome la  cara-

Tomás: Vení, sentate –me senté- ¿Qué pasa, chiquita?

Lali: Estoy intentando algo con un chico

Tomás: ¿Qué? ¿Con quién? ¿No te saca más de 3 años, no?

Lali: Papá, no te enojes, por favor –con los ojos llenos de lágrimas-

Tomás: Lali –serio- ¿con quién estás saliendo, y cuantos años te saca?

Lali: Peter y yo estamos intentando ser algo –lo miré, y estaba mudo- no te enojes, por favor –llorando-

Tomás: Recoge tus cosas, nos volvemos a Miami –levantándose-

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¡Hola,mis amores! (: Siento haber estado sin postear estos días,no tenia inspiración y estuve muy ajetreada ): Pero ya estoy acá,y tengo capitulos adelantados,así que +6 y subo el capitulo 6.

PD: Cambié el diseño del blog ¿Les gusta? Comentenme su opinión,plis.

¡Muchos muchos muchos besos lectoras! 

Laura.

Capítulo 4

Mi eterna mitad.

Capítulo 4.

Cuenta Peter.

Estábamos en el sofá acostados, hasta que Lali se da la vuelta y me sonríe.

Lali: -acariciando mi mejilla- Eres increíble –sonriendo-

Peter: ¿Besando? Sí, lo sé –riendo-

Lali: ¡Peter! –chillando-

Peter: Es broma tonta –sonriendo-

Lali: -suspirando se apoya en mi pecho-

Peter: Laa

Lali: -mirándome-

Peter: ¿Quieres contarme lo qué pasó?

Lali: Mejor después Peter, mi papá está por llegar y no quiero que me vea llorar, y mucho menos quiero que se entere de lo que pasó

Peter: Espera ¿te han hecho daño?

Lali: Físicamente no, Pitt, tranquilo –sonrisas-

Peter: No quiero verte mal –acariciándole los brazos- No quiero verte llorando así otra vez, como pille a la zorra que te ha hecho llorar, te juro que la mato

Lali: -sonrisa- Eres tan bueno…

Peter: Ya sé que estoy bueno –riéndome-

Lali: ¡Peter! –chilló- Basta

Peter: Eres preciosa –acariciando su mejilla-

Lali: Pitt…

Peter: ¿Qué? –rozando su nariz con la mía-

Lali: -mirando mis labios- Bésame Peter

Me acerqué a su boca, y dejé un suave beso en ellos. Me separé rápido y me miró extrañada. Sonreí y la apreté en mi pecho.

Peter: No querrás que tú padre nos vea en ese estado ¿verdad?

Lali: Pero uno solo –quejándose-

Peter: -risa- Ven aquí

Lali: -sonrisa-

La besé, un beso de labios, me separé, bufó, y me empecé a reír.

Lali: Ya que no me quieres dar un beso, acompáñame a la cocina a comer algo, muero de hambre.

Me levanté y hice que se levantara. La miré, y le di un beso, pero un buen beso. Nos separamos cuando la falta de aire se hizo presente. Me sonrió y enseguida sus mejillas se tornaron de un color rojizo. Sonreí y fuimos a la cocina. Mientras se hacía unos bocadillos, yo la observaba. A penas hacía 2 días que había venido y ya me había vuelto loco. Pero ¿desde cuándo una tía me enamora? No, eso es imposible. Pero es que la miro y es como si su sonrisa me diera vida, y como si sus ojos fueran el camino, un camino que no quería acabar nunca.

Lali: Pitt –chasqueando los dedos- Acaba de llegar mi padre

Peter: Eh?

Lali: -riendo- Que acaba de llegar papá, cuando se acueste, vente a mi habitación y te cuento eso ¿vale?

Peter: Vale

Después de que Tomás subiera a descansar a su habitación, Lali y yo subimos a su cuarto. Se sentó y empezó a hablar.

Lali: Bien ¿qué es lo que quieres saber?

Peter: -mirándola obvio-

Lali: Está bien. Todo empezó cuando yo tenía 11 años. Un día, cuando salí de la escuela, mi hermana estaba esperándome fuera. Se llamaba Patricia. Era la mejor persona que había conocido, era mi mejor amiga, y como una madre. –sonriendo con los ojos llenos de lágrimas- Cuando íbamos por la carretera, cerca de Manacor, un camión se nos vino encima, y la mató. –empezaba a llorar- Vi como el camión impactaba contra el lado del conductor aplastando a mi hermana completamente, yo estaba en la parte de atrás, y pude salir del coche con ayuda de unas personas que vieron el accidente. Vi como sangraba. Como moría delante de mí. –llorando desesperada- -la abracé- La sacaron del coche, estaba llena de sangre, todo estaba lleno de sangre. Me abracé a ella, y me desperté en el hospital. Tenía unas pequeñas heridas, y me escayolaron el brazo.

Peter: Tranquila –ella estaba sobre mi pecho, acurrucada como una pequeña niña indefensa- shh, tranquilízate

Lali: -hipeando- Hoy, cuando he ido a visitar a mi madre, me ha echado en cara la muerte de Patri, me he llamado asesina, y me ha dicho que no me quiere volver a ver en su puta vida. La odio tanto Peter –llorando-

Peter: No, no llores, esa zorra no merece tus lágrimas –secándolas- No las merece cariño, tú eres fuerte.

Lali: No soy fuerte –llorando- Soy una mierda, vi morir a mi hermana y no hice nada para impedirlo, yo tendría que haber muerto joder, no ella

Peter: No digas eso nunca más, escúchame –levantando su cara- Tranquila pequeña

Lali: No puedo más, Peter –llorando-

Nos quedamos un rato abrazados, ella sobre mí, tumbada en mi pecho, y llorando. Y yo abrazándola, con el mentón encima de la cabeza, intentando calmarla.

Lali: Me siento fatal Peter, me perseguirá toda la vida –llorando-

Peter: No te puedo asegurar que vayas a olvidarlo, porque sé ciertamente que nunca lo podrás hacer –bajó la cabeza- mírame Lali –levanté su cabeza y miré sus preciosos ojos marrones- sé que nunca vas a olvidarlo, pero te aseguro que voy hacer todo lo posible para que no te atormente más, te prometo que esa sonrisa tan bonita que tienes va a volver, te lo prometo

Lali: -mirando mis ojos embobada- Gracias por todo Peter, te juro que no sé como agradecerte lo mucho que estás haciendo por mí

Peter: No seas tonta –riendo- No me debes nada, aunque… quien sabe, igual podrías darme un besito, o dos, no, dos no, tres, y te dejo libre –sonriendo-

Lali: -sonrisa-

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Hola,perdón por no subir antes,no he tenido el tiempo que esperaba tener... Aun así,aquí estoy,espero que os gusten estos capítulos,porque los que vienen seguramente os gusten más. -Laura-@sonrisamariana

                           +5 comentarios y subo el próximo

Capítulo 3

Mi eterna mitad.

Capítulo 3.

Tomás: Apártate de mi hija!

Lali: Papá –adormilada-

Peter: ¿Qué pasa Tomás? Solo se ha quedado dormida

Tomás: Era broma –riendo- ¿Cómo estás, princesa? –besando mi frente-

Lali: Dormida –me quejé sobre el hombro de Peter-

Tomás: -riendo- Peter ¿serías tan amable de llevarla a su habitación?

Peter: Sí, claro.

Noté como papá se fue y como Peter me cogía entre sus brazos.  Me llevó hasta mi habitación y me tumbó, echándome el acolchado por encima para que no tuviese frío. Con los ojos cerrados, formule un “Gracias”, a lo que él contestó con un “no hay de qué, descansa”, y se fue.

Cuenta Peter.

Cuando me desperté al día siguiente, me levanté y vi a Lali en la cocina. Sonreí, y besé su mejilla mientras le daba los buenos días.

Lali: Buenos días, Peter –sonrisa- He hecho café, ¿quieres?

Peter: Tranquila, yo me echo.

Lali: ¿Has dormido bien?

Peter: Sí, y veo que tú también –riendo-

Lali: -sonrisa- Siento haberte dejado riendo solo, no controlo mi sueño

Peter: No importa Mariana, me gustó verte dormir

Lali: -sonrojándome- Supongo que a mí me gustó dormir a tu lado

Peter: -risa- Eso es bueno de saber

Lali: Yo.. quiero decir.. es que.. qué vergüenza..

Peter: -risa- No me molesta que me digas eso, tranquila. –mirándole a los ojos- Eres preciosa, Lali

Lali: ¿Así, toda despeinada? No lo creo, Peter

Peter: Eres preciosa, Lali –repetí- Y así, toda despeinada, todavía más –acercándome a ella-

Lali: Peter.. –nerviosa-

Peter: No voy a hacer nada que no quieras, tranquila Lali –sonriendo- ¿Quieres ver una película?

Lali: -nerviosa- Vale

Nos pusimos a ver una película, era de miedo.

Lali: Cuando haya partes feas, avísame, no quiero mirar

Peter: La..

Lali: ¿Qué?

Peter: Se viene una parte fea –sonrisa-

Lali: -abrazándome y escondiendo su rostro en mi pecho-

-.-.-.

Cuenta Lali.

Había venido a visitar a mi madre, cuando me hizo pasar, vi muchas botellas de licor a su alrededor.

Lali: Mamá, ¿qué es esto?

Carolina: ¿Para qué has venido?

Lali: Para verte, mamá

Carolina: Bien, ya me has visto, ahora lárgate

Lali: -la miré raro- Mamá, solo quería pasar tiempo contigo

Carolina: ¿Has pensado en que por algo me fui de tu lado? –eso hace que mi corazón se parta- Maldita zángana, vete de aquí ahora mismo

Lali: Estás borracha, mamá –con los ojos llenos de lágrimas-

Carolina: Oh, vamos Lali, no estoy borracha, por un momento pensé que podías haber cambiado, pero sigues siendo la niñata entrometida y llorona de siempre, das asco. Menos mal que tu hermana está muerta, hubiera muerto del aburrimiento a tu lado –empiezo a lagrimear- La mataste Mariana, tu eres la culpable de que ella haya muerto, eres una asesina, vete de mi casa, no te quiero ver más, ¡fuera!

Caminé y caminé, hasta que se puso a llover. Llegué a un parque y me senté en mitad del camino. Escuché mi nombre, y me giré.

Cuenta Peter.

Salí a dar una vuelta, hasta que se puso a llover. Iba camino a casa, hasta que me encontré a una chica llorando. Me acerqué un poco y vi a Lali tirada en el suelo.

Peter: ¡Lali! –grité-

Corrí hacia ella y la abracé muy fuerte, ella lloraba desesperadamente.

Peter: Lali, Lali –no respondía- ¡¿Qué ha pasado Lali?!

Lali: La odio, la odio, la odio, la odio –llorando desesperada-

Peter: Tranquila –la abracé- Ven –ayudándola a levantarse- Vamos a casa ¿vale?

Lali: Vale –llorando-

Cuando llegamos, cogí una toalla y se la pasé por los hombros, estaba empapada. Seguía llorando, y cada minuto que pasaba se me hacía una eternidad.

Peter: Tranquila La –abrazándola- Tranquila preciosa

Lali: -llorando- La odio Pitt, la odio mucho

Peter: Sh, si no me quieres contar, no me lo cuentes, pero tranquilízate

La abracé y ella quedó con la cabeza en mi pecho. Pasaron los minutos, y ella levantó su cabeza para mirarme a los ojos.

Lali: Perdón –puchereando-

Peter: No me pidas perdón Lali, tranquila

Lali: Te he manchado la camisa de maquillaje –llorando-

Peter: Más tarde la pongo a lavar, ahora deja de llorar, no me gusta que llores

Lali: -beso-

Peter: -separándome- -mirándola a los ojos- -beso-

Lali: -separándose- Perdón, perdón, perdón –mirando hacia abajo-

Peter: No me pidas perdón –acariciando su mejilla- Tranquila, no me pidas perdón –abrazándola-

Así nos quedamos, abrazados en el sofá, mientras veíamos la lluvia caer sobre el cristal.

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Capítulo 3! PRIMER beso Laliter! ¿Qué os ha parecido? ¿La madre de Lali? Ponerme vuestra opinión en los comentarios,por favor.

+5 y subo

Capítulo 2

Mi eterna mitad

Mansión Lanzani.

Cuenta Peter.

Salí de la habitación, y bajé con Sergio al salón.

Peter: Te has pasado, tío –riendo- Le has hecho sangre

Sergio: Besa fatal la niña eh –riendo- No te recomiendo besarla tío, que asco

Peter: No tiene experiencia –riendo- si es una niñata, no habrá besado a nadie en su vida

-.-.-.

Tomás: Buenos días Pedro –sonriendo- Mi hija está durmiendo, cuando despierte dile donde están las cosas, porque te conozco y sé que no le vas a hacer el desayuno, así que, por favor, se amable con ella

Peter: Eh, eso ha dolido –riendo- Yo te la cuido, tú tranquilo

Tomás: Vuelvo por la tarde, adiós –se fue-

Peter: ¿La despierto o le hago el desayuno? La despierto

-.-.-.

Peter: -moviéndola- Eh, niña, despierta, tu padre acaba de irse

Lali: ¿Qué quieres? –adormilada-

Peter: Que te levantes y hagas la cama, desayunes, te vistas, y hagas cualquier cosa, yo voy a estar con una tía en mi habitación, por nada del mundo nos interrumpas ¿te queda claro?

Lali: Buenos días a ti también –sonrisa falsa- Dime donde están las cosas –levantándose- y te dejo en paz

Peter: -mirándola- ¿Siempre duermes con eso? –señalando su pijama-

Lali: Sí ¿algún problema?

Peter: Es un poco.. pequeño

Lali: -bufando- ¿Tienes cereales?

Peter: A ver, no tengo tu edad ¿vale? Hay sándwiches, leche, galletas, y lo que tú quieras, menos cereales

Lali: ¿Quién te crees que eres? Creído de mierda

Peter: Creído, pero con motivos. ¿Cuánto mides? Porque tienes 12 años, ¿no?

Lali: Gilipollas

-.-.-.

Mi madre me dio la dirección de su casa y cuando llegue le di un largo y fuerte abrazo.

Lali: Mamá –llorando- Te echaba tanto de menos

Carolina: Mi niña –abrazándome- Yo también –secándome las lágrimas-  No llores. ¿Cómo has estado? Qué guapa estás –sonriéndome-

Estuvimos hablando sobre nuestras vidas, cuando de repente nos dimos cuenta de que era de noche, nos despedimos y juramos volver a vernos en unos días, ya que ella trabajaba.

-.-.-.

Peter: Mariana –mirándome- ¿Cuándo has llegado?

Lali: Acabo de llegar –sonrisa-

Peter: Genial, he hecho la cena, espero que te guste el pollo asado

Lali: Oh, dios, sí, me encanta, estoy hambrienta

Peter: Bueno, siéntate, ahora traigo la comida

-.-.-.

Peter: Bueno –comiendo- Cuéntame algo sobre ti –sonriendo-

Lali: ¿Mi vida? –sonrisa-

Peter: Tu vida –sonrisa- Tus aficiones, qué te gusta hacer, quienes son tus mejores amigos, y cosas así

Lali: Vale –sonriendo- Me llamo Mariana Esposito, tengo 17 años, nací en la comunidad de Buenos Aires, Argentina. Amo cantar y bailar, me gusta estar en casa, no salgo casi nunca, por causas del trabajo de papá, siempre hemos estado viajando y no he tenido oportunidad de hacer amigos –mirada triste- Mi color favorito es el verde, turquesa, mi comida favorita es el Mc Donalds –Peter ríe-

Peter: Genial –risa- ¿Tú familia? ¿Tu madre?

Lali: -mi sonrisa desapareció- No tengo familia, aparte de mis padres, ellos se separaron cuando yo tenía 9 años, mi madre se vino a vivir aquí, y hasta el día de hoy no la había vuelto a ver. Mi hermano se fue de casa cuando yo era pequeña, desapareció, nunca hemos vuelto a saber sobre él.

Nunca le he contado a nadie que tenía una hermana. Un día, cuando yo estaba saliendo de la escuela, me encontré a mi hermana esperándome fuera del colegio. Me subí, y cuando íbamos por mitad del camino, un camión impactó en la parte delantera del auto, aplastando a mi hermana completamente. Yo logré salir del coche antes de que explotara, ella ya había muerto. Su nombre era Patricia, pero eso no lo iba a contar, nadie sabía de ello, quitando a mis padres del medio, y nadie lo iba a saber.

Peter: guau –sorprendido- Siento lo de tu hermano, debió ser muy duro.

Lali: -Si supieras lo que fue ver a mi hermana morir delante de mis ojos..- Si, está bien, no me acuerdo muy bien, por lo que no es tan doloroso –mirando hacia abajo- Bueno, te toca

Peter: -riendo- Me llamo Juan Pedro Lanzani, tengo 25 años, nací en Córdoba, Buenos Aires, me gusta tocar la guitarra, salir con amigos, y pasarla bien. Mi color favorito es el azul –sonrío- Mis padres se llaman Carlota y Sergio, tengo dos hermanas, Eugenia y Candela, mis mejores amigos son Nicolás y Rocío, son muy simpáticos –mirándome y riéndose- Y bueno, básicamente, mi vida es esa

Lali: Bonita vida, Peter Lanzani –sonrisa-

Peter: Gracias, Lali Esposito

Terminamos de comer entre risas y sonrisas, la verdad es que no era tan arrogante como parecía. Cuando acabamos, recogimos y nos pusimos a ver la tele. Vimos un rato La Que Se Avecina, nos reímos un montón, hasta que el sueño se apoderó de mí y, poco a poco me fui durmiendo. Noté como Peter me echaba una manta por encima, y, sentada en el sillón, con la cabeza apoyada en el hombro de aquel hombre, me dormí. No sé cuánto tiempo había pasado desde que me quedé dormida, solo sé que el grito de mi padre me despertó.

Tomás: Apártate ahora mismo de mi hija

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¡HOLA! Gracias por los 7 comentarios del prólogo y por los 4 en el anterior capítulo. ¿Las cosas se ponen feas? No sé, gracias por firmar, y por leer.

A los 5 comentarios subo otro capítulo.

Capítulo 1

MI ETERNA MITAD

CAPÍTULO 1.

Mansión Espósito.

*Conversación telefónica*

-Señor Espósito, me acaban de comunicar que la empresa “Douals” será trasladada a Los Ángeles los próximos días, me temo que usted y su hija van a tener que viajar y hospedarse en la casa de los Lanzani.

Tomás: ¿Por qué es trasladada?

Xxx: Los gastos en Miami son demasiados para que tan poca gente nos compre, vamos a probar qué tal están los instrumentales, y si va mal tendremos que volver.

Tomás: Está bien, ¿Cuándo tenemos que viajar?

Xxx: Hoy mismo, los pasajes ya están sacados, a las 21:30 tienen que estar en la terminal 9,una limusina les estará esperando.

*Fin conversación telefónica*

Tomás: ¿Como le voy a decir esto a Lali? –suspiro-

Lali: ¿Decirme el qué, papá?

Tomás: Lali…

Lali: ¿Decirme el qué, papá?

Tomás: Tenemos que viajar a Los Ángeles hija, la empresa acaba de trasladarse, tenemos que irnos de inmediato.

Lali: -suspiro- Está bien, voy a hacer las maletas.

Cuenta Lali.

Subí a mi habitación y mientras hacía la maleta, lloraba en silencio. Estaba harta de todo esto, siempre viajábamos y nunca había tenido la oportunidad de hacer amigas.

Cuando estaba acabando de hacer la maleta, la puerta de mi habitación se abrió.

Tomás: Lali

Lali: -silencio-

Tomás: Lali –repitió- mírame hija –levantándome la cara- No llores –abrazándome-

Lali: -abrazándome a su pecho- No quiero viajar más, papá –llorando-

Tomás: Mi niña, mírame –hizo que lo mirara- Lo más probable es que nos quedemos a vivir en Los Ángeles, si todo sale bien, ya no tendremos que viajar más mi amor, podrás hacer amigas, hasta podrás echarte un novio –lo miré raro- Supongo que ya es hora de aceptar que tienes 17 años, tienes buena edad ¿no? –me reí-

Lali: Te quiero –sonriendo-

Tomás: Yo a ti más, pequeña –besando mi cabeza- Y ahora ponte el abrigo, nos vamos enseguida

Me puse el abrigo, las zapatillas, y nos fuimos de esa casa, para siempre tal vez. Nos subimos a la lujosa limusina de papá y su empresa, y nos dirigimos al aeropuerto. A mitad del camino sentí como papá me abrazaba y me pegaba a su pecho, sonreí, me relajé, y me adentré en un sueño profundo. Un rato después me desperté por los susurros de papá, que me decía que ya habíamos llegado al aeropuerto.

-.-.-.

Cuando llegamos a Los Ángeles y fuimos a la mansión Lanzani, nos abrió un chico bastante guapo. Su nombre era Peter, o eso es lo que recuerdo.

Tomás: Querido Juan Pedro –se dieron la mano y se dieron un apretón- Que alegría volver a verte, estás más grande

Peter: La última vez que me viste fue a los 8 años, Tomás –sonriendo- Y ¿ella es? –mirándome-

Tomás: Es mi hija

Lali: Lali, soy Lali, un gusto conocerte, Juan Pedro–sonriendo-

Peter: El gusto es mío, Lali –nos sonrió- Bueno, pasad, estáis en vuestra casa

Peter nos acompañó a recorrer la casa, era enorme, acompañó a papá a su habitación, y después de dejarle en esta, me acompañó hasta la cocina a comer algo.

Peter: Hazte lo que quieras, hay de todo –sonrisa burlona-

Lali: ¿Me puedes decir dónde están las cosas?

Peter: En la cocina –se rió son un amigo que acababa de entrar a la cocina-

Lali: No jodas! –mirándole mal-

Peter: Búscate la vida niña, en los cajones hay comida

Lali: Se me han ido las ganas de comer –cogiendo mi maleta- Buenas noches

Entré a mi supuesta habitación, coloqué la ropa en el armario, cogí el teléfono y me acosté.

*Conversación telefónica*

Lali: ¿Aló? ¿Mamá?

Carolina: Hija ¿estáis ya en Los Ángeles?

Lali: Sí mamá ¿en qué hotel estás? Quiero verte

Carolina: Nos vemos mañana, tesoro. ¿Estás con papá?

Lali: Papá está durmiendo ya, mañana vienes ¿verdad?

Carolina: Mañana me tienes ahí para abrazarte cariño, duerme

Lali: Mamá, te quiero

Carolina: Y yo a ti, mi pequeña

*Fin conversación telefónica*

Cerré los ojos, y cuando estaba a punto de dormirme, la puerta de mi habitación se abrió.

Xxx: Hola, muñeca

Lali: -asustada- ¿Quién eres?

Xxx: Sergio, ¿te vienes a mi habitación?
Lali: Fuera de mi habitación –caminando hacia atrás-

Sergio: No –beso-

Me besó a la fuerza, un beso duro, un beso zarpado, un beso realmente asqueroso. Empezó a tocarme las tetas y el culo, y yo empecé a llorar. De repente lo alejaron de mí y le pegaron un puñetazo. Miré y era Peter. Cuando lo echó, se acercó a mí.

Peter: ¿Estás bien? Lo siento mucho –mirándome el labio, ya que este sangraba por el mordisco-

Lali: -llorando-

Peter: Perdón, perdón, ven –me llevó al baño y empezó a curarme el labio- Lo siento Lali, no había visto que no estaba en el comedor

Lali: No importa Peter

Peter: No, si importa, ven a cenar algo

Lali: No, no tengo hambre Peter, vete, por favor, estoy cansada, ha sido un largo viaje

Peter: ¿A ti quien te entiende? –cerrando la puerta de un portazo-

Lali: Imbécil –acostándome-

Y sí, era lo que creí cuando lo vi por primera vez, un estúpido y arrogante millonario. Otro más del montón.

Al día siguiente….

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Aquí os dejo el primer capítulo, espero que os guste, pronto #Laliter 

+4 comentarios y subo más!

Os dejo, un beso a todas mis lectoras!

-Laura, @sonrisamariana